La orquiectomía es el procedimiento en el que se extirpan uno o ambos testículos.
Los testículos, son órganos reproductores masculinos que producen esperma, se asientan en un saco llamado escroto ubicándose justo debajo del pene.
La orquiectomía más frecuente en las mujeres transgénero es la bilateral, en la cual se extirpan ambos testículos.
Para prepararse al procedimiento, es probable que el cirujano requiera algunas pruebas para demostrar:
- Presencia de disforia de género,
- Puede dar su consentimiento para el tratamiento y tomar una decisión acertada
- No tiene ningún problema médico o de salud mental no controlado.
- Por lo general, el médico le pedirá que proporcione informes de salud mental.
- Es posible que deba completar un año (12 meses consecutivos) de terapia hormonal antes de someterse a una orquiectomía.
El procedimiento tomará de 30 a 60 minutos. Antes de que comience la cirugía, se utilizará anestesia local en el área operatoria o anestesia general para que se duerma y no sienta nada. Luego, el cirujano hará una incisión escrotal tomando en consideración la posibilidad de una futura vaginoplastia y se extraerán uno o ambos testículos, cerrando la incisión con suturas.
La cirugía en sí, es un procedimiento ambulatorio. Esto significa que si lo dejaron en la mañana para el procedimiento, podrá irse antes del final del día.
En cuanto a la recuperación física del procedimiento, la misma durará entre unos pocos días y una semana. Se indican analgésicos comunes, antiinflamatorios y colocar frío local en la zona operatoria.
Según la reacción a la orquiectomía, se puede reducir la dosis de estrógeno y disminuir gradualmente cualquier medicamento bloqueador de andrógenos preoperatorio.
Las complicaciones típicas de la cirugía pueden incluir:
- Sangrado o infección
- Lesión de los órganos circundantes
- Cicatrices
- Pérdida de sensibilidad local
- Esterilidad
- Disminución de la libido y la energía
- Osteoporosis
Las mujeres transgénero que se someten a una orquiectomía experimentan una serie de efectos secundarios positivos, que incluyen: disminución drástica de la testosterona, lo que puede permitirle reducir su dosis de hormonas feminizantes,
reducción de la disforia de género a medida que se acerca un paso más para hacer coincidir su apariencia física con su identidad de género.
Una orquiectomía también se considera a menudo un paso previo importante hacia una vaginoplastia, en la que el cirujano construye una vagina funcional.
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