La cirugía de banda gástrica ajustable disminuye el tamaño de la abertura del estómago, lo que reduce la cantidad de alimentos a ingerir llevando a una pérdida considerable de peso siempre que se sigan las indicaciones en el seguimiento, desde el punto de vista nutricional, que indiquemos en la consulta.

Posterior a la cirugía de banda gástrica, se debe consumir alimentos líquidos durante aproximadamente una semana. La segunda semana se podrá comer alimentos en puré y luego se iniciarán los sólidos, manteniendo el consumo proteico en todas estas etapas, cambio éste en la alimentación motivado por el proceso inflamatorio que se genera en el estómago, en la zona de la colocación de la banda, tras la intervención.
Después del procedimiento se deberá desarrollar una forma completamente nueva de comer que la que se tenía previo a la cirugía. La nueva dieta requerirá ingerir comidas más pequeñas y masticar lentamente los alimentos. Pasadas unas tres semanas después de la intervención se puede consumir frutas y verduras blandas, puré de manzana, zanahoria e incluso brócoli. Utilizar condimentos, hierbas y especias si son tolerados. Más adelante, se volverá a incluir frutas y verduras enteras en la dieta excluyendo las pieles fibrosas.
Se debe evitar comer y beber al mismo tiempo. Esta es una de las reglas más importantes a seguir después del procedimiento. Mantenerse hidratado, pero evitando ingerir líquidos 10 minutos antes y 45 minutos después de las comidas. En las primeras semanas posterior a la cirugía, el estómago será tan pequeño que comer líquidos y sólidos al mismo tiempo podría provocar vómitos. El agua puede hacer que la comida sea expulsada del estómago, lo que provoca una sensación de vacío y puede conducir a comer en exceso.
Limitar la pasta, el arroz y el pan, cada uno de estos alimentos se expande cuando se encuentra con los fluidos gástricos. Esto puede causar molestias en algunas personas. Puede ser útil evitarlos o comerlos solo en cantidades muy limitadas. Es recomendable ingerir porciones pequeñas para minimizar las posibles molestias. La mayoría de los pacientes tienden a comer de un cuarto a media taza de comida. Las recomendaciones nutricionales son de suma importancia por lo tanto hay que asegurarse de consumir suficientes proteínas (pescado, pollo, pavo, carne picada).
Si es necesario, también se puede agregar un suplemento de proteínas.
La cirugía de banda gástrica es una herramienta que ayuda a perder peso, pero puede no ser una solución en sí misma. Los resultados reales de pérdida de peso provienen de los cambios en la nutrición y el reinicio de la actividad física después del procedimiento.
En conclusión la banda gástrica es una técnica segura, eficaz y duradera para el control de la obesidad, es reversible y no produce alteraciones nutricionales siempre y cuando se cumplan con las recomendaciones suministradas por el cirujano y su equipo.